Miqueas 7(7- 8)
Pero en cuanto a mí, miraré al Eterno. Esperaré del Eterno mi salvación.
No te regocijes contra mí, oh enemigo mío. Aunque caiga, he de levantarme. Aunque me siente en las tinieblas, el Eterno es luz para mí.
Miqueas 7 (1-5)
7 !!Ay de mí! porque estoy como cuando han recogido los frutos del verano, como cuando han rebuscado después de la vendimia, y no queda racimo para comer; mi alma deseó los primeros frutos.
2 Faltó el misericordioso de la tierra, y ninguno hay recto entre los hombres; todos acechan por sangre; cada cual arma red a su hermano.
3 Para completar la maldad con sus manos, el príncipe demanda, y el juez juzga por recompensa; y el grande habla el antojo de su alma, y lo confirman.
4 El mejor de ellos es como el espino; el más recto, como zarzal; el día de tu castigo viene, el que anunciaron tus atalayas; ahora será su confusión.
5 No creáis en amigo, ni confiéis en príncipe; de la que duerme a tu lado cuídate, no abras tu boca.